El G7 fustiga a China y advierte a los países que van contra Ucrania
El Papa Francisco participó del encuentro y marcó las cosas negativas de la IA. Los poderosos cerraron filas para evitar que naciones aliadas financien a Rusia.
Mundo
15 / 06 / 2024

El Papa Francisco hizo una aparición histórica en la cumbre del Grupo de los Siete (G7) para hablar de los pros y los contras de la inteligencia artificial, y en la que los líderes del G7 se comprometieron a hacer frente a lo que calificaron de prácticas comerciales dañinas de China.
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, anfitriona de la cumbre, invitó al papa y a otros jefes de Estado y de Gobierno, entre ellos el primer ministro de India y el rey de Jordania, en un esfuerzo por demostrar que el G7 no es un club distante y exclusivo. "Nunca aceptaremos la narrativa que quiere a 'Occidente contra el resto'", dijo Meloni.
El papa, que llegó en silla de ruedas y fue recibido calurosamente por líderes como el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su compatriota argentino, el presidente Javier Milei, reconoció la ambivalencia que rodea a la IA, afirmando que puede inspirar entusiasmo y ampliar el acceso al conocimiento.
"Pero, al mismo tiempo, podría traer consigo una mayor injusticia entre naciones avanzadas y en desarrollo o entre clases sociales dominantes y oprimidas", afirmó el líder de los católicos de 87 años.
En su largo discurso avisó de los estragos de su aplicación en la industria de la guerra y pidió prohibir las "armas autónomas letales". "Precisamente sobre este tema permítanme insistir en que, en un drama como el de los conflictos armados, es urgente replantearse el desarrollo y la utilización de dispositivos como las llamadas 'armas autónomas letales' para prohibir su uso, empezando desde ya por un compromiso efectivo y concreto para introducir un cada vez mayor y significativo control humano", instó.
Los principales miembros del G7, entre los que también están Gran Bretaña, Francia, Alemania, Japón y Canadá, se habían centrado antes en el poder económico de China y en lo que consideran mercados desequilibrados en ámbitos como los vehículos eléctricos, el acero y las energías renovables.
En el borrador del comunicado de la cumbre, al que accedió Reuters, se subrayó que el G7 no pretendía perjudicar a China ni frustrar su desarrollo económico, sino "seguir tomando medidas para proteger a nuestras empresas de las prácticas desleales, nivelar el terreno de juego y remediar los daños".
El G7 también advirtió de que tomaría medidas contra las instituciones financieras chinas que ayudaran a Rusia a obtener armas para su guerra contra Ucrania. También advirtieron a Irán con "responder de forma rápida y coordinada, incluso con medidas nuevas e importantes" si Teherán sigue apoyando a Rusia en la guerra de Ucrania con "misiles balísticos y tecnología relacionada". Al tiempo que pidieron elecciones limpias en Venezuela.
Durante el primer día de su reunión en el sur de Italia, los países del G7 llegaron a un acuerdo para conceder a Ucrania préstamos por valor de US$50.000 millones.
Sin embargo, Meloni, que encabeza un Gobierno de derechas, se topó con aguas turbulentas por el tratamiento de temas sociales delicados en el comunicado que resumía la labor del G7.
El reclamo de Brasil
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, defendió ayer la propuesta de su país de gravar globalmente a los superricos, durante su intervención en la cumbre del Grupo de los Siete (G7) en Italia. "Ya es hora de que los superricos paguen los impuestos que les corresponden", dijo Lula al G7, según un discurso escrito divulgado por el Gobierno de Brasil. El país sudamericano ha impulsado esta propuesta como una de las prioridades de su presidencia del Grupo de los Veinte (G20).
