Oficial: el Gobierno aumentará las retenciones a la soja y el maíz a partir del 1 de julio

Según el decreto, las retenciones para la soja aumentarán del 26% al 33%, mientras que las del maíz y el sorgo pasarán del 9,5% al 12%. Además, se ajustará la del girasol, que regresará al 7% después de haber estado en un 5,5% durante los últimos cinco meses. En contrapartida, las alícuotas para el trigo y la cebada se mantendrán en un 9,5% hasta el 31 de marzo de 2026.

El decreto, firmado por el presidente Milei, el jefe de Gabinete Guillermo Francos y el ministro de Economía Luis Caputo, especifica que solo los productos detallados en el anexo conservarán la alícuota reducida. Los cultivos de invierno incluidos deberán cumplir con un requisito adicional: los exportadores deberán liquidar al menos el 90% de las divisas en un plazo de 30 días hábiles desde la Declaración Jurada de Venta al Exterior (DJVE) correspondiente.

Esta prórroga extiende el plazo establecido por el decreto 38/2025, que había impuesto una ventana de 15 días hábiles para el ingreso de divisas al país. Aquellos que no cumplan con este nuevo requisito perderán el beneficio tributario y estarán sujetos a la alícuota más alta que aplique para el cultivo en cuestión.

Desde el Gobierno explicaron que la extensión de las alícuotas reducidas para trigo y cebada responde a la necesidad de asegurar la eficacia en su exportación, dado que la campaña 2025/2026 para ambos cultivos está en curso. La medida no alcanzó a los cultivos de verano como la soja y el maíz, cuya cosecha ya está avanzada.

El aumento de las retenciones ha generado preocupación y críticas entre las entidades agropecuarias. Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) expresó su inquietud ante el restablecimiento de los Derechos de Exportación (retenciones), mientras que Coninagro destacó la necesidad de reglas claras para planificar la producción y mantener la inversión y rentabilidad en el sector.

El impacto de estas medidas se refleja también en los datos de siembra de cultivos invernales, donde se observa un avance significativo en el área destinada a trigo y cebada. A pesar de la continuidad del beneficio para estos cultivos, los productores han manifestado su preocupación por la reimposición de las alícuotas previas para cultivos como el maíz, cuya cosecha aún no ha finalizado.

Analistas del mercado han señalado que el aumento de las retenciones podría impactar negativamente en la comercialización de soja y maíz en los próximos meses, afectando la liquidez y las decisiones comerciales en el sector agroindustrial.

La fecha elegida para la publicación del decreto también ha sido interpretada en clave política, dado su cercanía con la exposición de La Rural. La posible presencia del presidente Milei en este evento ha generado expectativas sobre posibles anuncios o gestos hacia el sector agropecuario.

Mientras tanto, el Gobierno sigue enfocado en consolidar las cuentas públicas, recuperar el superávit fiscal y fortalecer las reservas del Banco Central. La actualización del esquema de retenciones forma parte de ese objetivo de equilibrio macroeconómico, aunque las tensiones con los sectores productivos persisten.