Fuerte rechazo del campo salteño a la suba de retenciones

El campo salteño expresó su preocupación ante el restablecimiento de las retenciones a la soja, el maíz y el girasol, dispuestas por el Gobierno nacional a partir del 1 de julio. José Figueroa, dirigente rural de la zona, advirtió que esta medida tendrá un fuerte impacto en la producción, especialmente en plena cosecha. “Las retenciones desalientan la producción”, destacó Figueroa, quien solicitó una prórroga para el NOA, argumentando que la región enfrenta su época de cosecha justo en este periodo.

El dirigente rural planteó que el beneficio de la baja temporal de las retenciones no llegó al norte argentino, lo que deja a los productores salteños en una situación desventajosa respecto al resto del país. "Nosotros no fuimos incluidos en esta baja, mientras que muchos productores del sur sí lo fueron", expresó Figueroa, quien solicitó una extensión de la rebaja para el NOA. Además, destacó que el apoyo del Gobierno provincial, encabezado por el vicegobernador Antonio Marocco, fue clave para visibilizar el reclamo ante el Ministerio de Economía de la Nación.

A pesar de las gestiones realizadas, la situación sigue siendo crítica. Figueroa remarcó que las retenciones son impuestos “distorsivos” que afectan la competitividad de los productores locales. En ese sentido, explicó que los productores deben enfrentar la competencia de países vecinos como Brasil, que siguen avanzando en términos de producción, mientras que Argentina se mantiene estancada. “Imaginen, la soja vuelve a tener un 33% de retenciones. Es como si un socio se quedara con un porcentaje significativo de lo que produces sin arriesgar nada”, criticó.

El dirigente también recordó que las retenciones no son coparticipables, por lo que los recursos no regresan a las provincias. En el caso de Salta, Figueroa subrayó que el agro local aportó 174 millones de dólares a la Nación, una cifra significativa que, según él, debería ser considerada a la hora de definir políticas fiscales para el sector. “El campo salteño es un pilar fundamental para la economía nacional, pero las medidas que toma el Gobierno lo ahogan”, añadió.

Finalmente, Figueroa dejó en claro que las retenciones no solo afectan a los productores de soja, sino a todos los sectores del agro. "No nos alcanzó la baja. El fuerte de la cosecha, con la mayor cantidad de hectáreas, se da en julio y agosto, y ahí es donde el impacto será mayor", concluyó.